“La acumulación de sedimentos en el fondo marino debido a los
causes de los ríos que llegan a la Bahía, además de algunos aspectos de
carácter de contaminación y la sobre explotación de la pesca, también
afectan los niveles de capturas en Caimanera”, explicó el Dr.
Gustavo Arencibia Carballo, durante un intercambio que sostuvo con
especialistas de las unidades empresariales de base de la localidad,
Alevinaje en Guantánamo y Baramar de Baracoa.
Así mismo se debatió sobre la posibilidad de explotar la acuicultura marina debido a que la sequía, impide el crecimiento sustancial de la agricultura y la ganadería, por lo tanto el mar se convierte en una fuente importante de alimentación del pueblo.
“Cifras de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, mundialmente conocida como FAO, dicen que la acuicultura es capaz de crecer a un cinco o siete por ciento anual, a diferencia de la agricultura que solo crece a un dos por ciento. Por lo tanto el futuro de la alimentación del mundo y de Cuba en particular está cifrado en el crecimiento del maricultivo”, afirmó el investigador y máster Raúl Flores Gutiérrez durante el taller sobre ciencia y producción.
En dictámenes realizados a la Bahía de Guantánamo los especialistas del Centro de Investigaciones Pesqueras de La Habana demostraron que las aguas de la Bahía contienen elementos a favor para el maricultivo, de manera que si se logra implementar, esto daría al traste con parte de la alimentación para la siembra de especies como el camarón. En tanto el cultivo de quistes y biomasa de Artemias, en la salina “Frank País”, enclavada en la entrada de esta localidad, fue otro tema con posibilidad de entrar en proyectos de desarrollo local, producto con muy buena aceptación en el mercado nacional e internacional, según expuso el Dr. Rafael Tizol Correa, del Centro de Investigaciones Pesqueras de la Habana, quien aseguró que marcan un buen precio en la comercialización, a favor de un posible productor.
A decir de Danilo Ruano, director de la UEB-CAIMAR, los últimos antecedentes de maricultivo que existen el territorio datan de los años 90, de manera especial con la especie tilapia (un pez de agua dulce que lograron sembrar en la bahía), lo que permitió en ese entonces un mejor abastecimiento alimenticio a la población caimanerense.
Así mismo se debatió sobre la posibilidad de explotar la acuicultura marina debido a que la sequía, impide el crecimiento sustancial de la agricultura y la ganadería, por lo tanto el mar se convierte en una fuente importante de alimentación del pueblo.
“Cifras de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, mundialmente conocida como FAO, dicen que la acuicultura es capaz de crecer a un cinco o siete por ciento anual, a diferencia de la agricultura que solo crece a un dos por ciento. Por lo tanto el futuro de la alimentación del mundo y de Cuba en particular está cifrado en el crecimiento del maricultivo”, afirmó el investigador y máster Raúl Flores Gutiérrez durante el taller sobre ciencia y producción.
En dictámenes realizados a la Bahía de Guantánamo los especialistas del Centro de Investigaciones Pesqueras de La Habana demostraron que las aguas de la Bahía contienen elementos a favor para el maricultivo, de manera que si se logra implementar, esto daría al traste con parte de la alimentación para la siembra de especies como el camarón. En tanto el cultivo de quistes y biomasa de Artemias, en la salina “Frank País”, enclavada en la entrada de esta localidad, fue otro tema con posibilidad de entrar en proyectos de desarrollo local, producto con muy buena aceptación en el mercado nacional e internacional, según expuso el Dr. Rafael Tizol Correa, del Centro de Investigaciones Pesqueras de la Habana, quien aseguró que marcan un buen precio en la comercialización, a favor de un posible productor.
A decir de Danilo Ruano, director de la UEB-CAIMAR, los últimos antecedentes de maricultivo que existen el territorio datan de los años 90, de manera especial con la especie tilapia (un pez de agua dulce que lograron sembrar en la bahía), lo que permitió en ese entonces un mejor abastecimiento alimenticio a la población caimanerense.
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