Hoy cumplo años de vida y
aunque ya suman algunos, hay algo que aún no se me explicar… o mejor dicho es
una fecha que siempre me pone nostálgica, el 1ro de febrero.
Hoy me siento presa de
mis recuerdos. Por más que lo evite mi memoria viaja al pasado, donde las
fiestas, los amigos, los regalos, los amigos de papá, de mamá, la familia, el kake
y los globos abundaron siempre mi cumpleaños hasta el momento en que me hice
grande y no sé explicar cuando pasó, aunque en este presente me siento feliz
con mi hija, mi matrimonio, mi trabajo y mis amigos también es cierto que la
nostalgia hoy me aflora.
Y aunque algunos le
parezca capricho o niñería, extraño a mamá, y papá A las 6:00 de la mañana cantándome
el felicidades bebé en tu día… llenándome de besos y a mis amigos reunidos
junto a mi para celebrar mi cumpleaños.
Hace muchos años que la
tristeza se adueña de mi en mi cumpleaños, y aunque quienes me rodean este
Presente y Futuro hacen todo para que la pase bien, también es irrefutable para
mi el extrañar las cosas del pasado, de ese pasado que me envuelve en su
nostalgia por los días felices, pero sobre todo de ese Pasado que felicita
al Presente y Futuro.
Muchos de mis amigos me
felicitarán vía Facebook. Un hermoso gesto que, sin embargo, no sustituye jamás
el abrazo sincero, la palabra cariñosa, la sonrisa…
Hoy, mi madre está lejos
de mi, pero como siempre fue la primera que me cantó el felicidades bebé en tu
día.
Mis amigos del pasado,
aunque los guardo en mi corazón no son los mismos del Presente, pero les
aseguro que todos tienen su pedacito especial en mi corazón.
Desde que inició enero la
tristeza llegó a mi puerta. Y hace unos días que me di cuenta que el 1ro de
febrero es mi cumpleaños. Y hoy sé que llegó el día, que la nostalgia vuelve, a
su visita anual, y hoy solo recuerdo que ya suman 32 pasados que felicitan a
los 33 presente y futuro.
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